SENDERISMO: PR-G 113 Ruta das Pontes do Lérez
En el municipio de Forcarei se encuentra la ruta PR-G 113 Ruta das Pontes do Lérez. Es un sendero lineal de casi 14 kilómetros, está señalizado pero se recomienda llevar GPS, pues nos encontramos con algunas señales borradas y falta de señalización en algún cruce. La duración aproximada de ida es unas cuatro horas y la dificultad en general es baja aunque hay algún tramo con rocas resbaladizas en que podemos considerar la dificultad algo mayor. El punto de inicio se encuentra en el Monasterio de Aciveiro, a pocos metros de la carretera PO-534 que va de Lalín a Cerdedo o Soutelo de Montes. Gran parte del camino transcurre por la ribera del río Lérez, el cual nace cerca de Aciveiro, cuyas fuentes proceden de la sierra del Candán y acaba vertiendo sus aguas en la ría de Pontevedra.
El panel de inicio de la ruta lo veremos delante del parking del Monasterio de Santa María la Real de Aciveiro. Este monasterio cisterciense fue fundado en el año 1135 bajo el patrocinio de Alfonso VII y su iglesia del siglo XII es de estilo románico con fachada barroca del siglo XVIII. Los primeros metros de la ruta son por asfalto, hasta la Ponte Nova das Codeseiras, en donde haremos un tramo por la ribera del Lérez en el cual veremos algún molino en ruinas, pontellas, pasos de poldras hasta llegar a la aldea de Andón en el kilómetro dos.
Cruzamos la aldea y bajamos por un camino de piedras sueltas y con agua hasta la Ponte Vella de Andón, hasta este punto la ruta compartía camino con el PR-G 100 Sendeiro Natural Aciveiro-Candán. Continuamos río abajo unos metros, cruzamos la carretera y continuamos por pistas de tierra durante cuatro kilómetros, por el camino pudimos ver huellas de algún corzo. Esta es la zona de más altura de la ruta que llega a alcanzar los 750 metros.
Poco a poco comenzamos a descender hacia el río Lérez, el cual alcanzaremos al cruzar Ponte da Carballa. Seguimos el curso del río a lo largo del cual veremos varios molinos hasta llegar al área recreativa de Ponte do Crego. Aquí nos tomamos un merecido descanso cuando llevamos recorridos 8 kilómetros, comemos unas galletas bebemos algo y nos preparamos para continuar. En este lugar podremos ver unos bonitos pasos sobre el río restaurados, una fuente y unos bancos de piedra.
El camino continuará pasando por varios puentes como el Ponte Maril, algún molino y un paso de poldras por el que cruzaremos el río, hasta llegar a un amplia área recreativa en el que paramos a comer.
En el último tramo de 3 kilómetros hasta el final veremos varias represas, lo que queda de un viejo Batán o el Puente Gomail, que es el punto de menor altitud de la ruta. La vuelta la hicimos casi todo por pistas de asfalto, atravesando las aldeas de Cachafeiro, Espindo y Valiñas, en total algo más de 8 kilómetros.
MAPA:
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