RUTA: Ruta dos Dolmens de Vimianzo

En el municipio de Vimianzo existe un gran número de mámoas y dólmenes que datan de entre el 4000 y el 2000 a.C.. Muchos de estos dólmenes, se sitúan entre los más importantes de Galicia por antigüedad, tamaño y estado de conservación. En el ayuntamiento de Vimianzo ponen en valor estos monumentos megalíticos a través de una ruta que podemos hacer en coche, teniendo que caminar en algún tramo para llegar a ver los dólmenes. Los dólmenes fueron lugares de enterramiento en la antigüedad, en su momento se les relacionó con los seres mitológicos de la cultura gallega llamados Mouras, llegando a decir que vivían en los propios monumentos y que sobre sus cabezas transportaban las grandes rocas con las que se construían los mismos.

La ruta puede llevarnos hacerla unas cuatro horas y recorreremos alrededor de 60 kilómetros. A lo largo del camino veremos las señales de la ruta de los dólmenes. Para empezar la ruta saldremos de la AG-55 entre Baio y Vimianzo y en la rotonda que se cruza con la AC-552 ya podemos ver las señales de la ruta.

Seguiremos las señales pasando por la aldea de Bamiro hasta la iglesia de San Amedio de Bamiro. Aquí dejamos el coche y hacemos nuestra primera parada. Veremos la iglesia de Bamiro, el cruceiro y el reloj de sol que data del año 1800. Desde este lugar podemos hacer un desvío hasta la ermita de monte Torán, la carretera no está en buen estado, es recomendable ir andando.

Volvemos a la carretera de Baíñas, seguiremos las señales o el GPS, que siempre es recomendable llevarlo a mano, y pasaremos por las aldeas de Cheis, Tines, en donde veremos a nuestra izquierda la iglesia de Santa Eulalia, para llegar a ver el primer dolmen, el dolmen de Pedra Cuberta que data de los años 4000-3000 a.C.. Está señalizado y situado casi a pie de carretera. Volvemos al coche y dos kilómetros después llegaremos a Pedra Moura, también de los años 4000-3000 a.C. Hay una señal a pie de carretera aunque hay que caminar unos 100 metros por una pista.

Seguimos por la carretera unos otros dos kilómetros, atravesaremos la aldea de Carnio y antes de llegar a Serramo, a mano derecha veremos el panel que nos indica el dolmen Pedra da Lebre, situado también muy cerca de la carretera, de la misma cronología que los anteriores.

La siguiente parada es el dolmen Arca da Piosa, el que tiene el peor acceso aunque uno de los más interesantes en cuanto a tamaño. Tendremos que pasar Serramo y la aldea de Comareiro y recorrer unos dos kilómetros por una pista de tierra hasta llegar a él. Regresaremos por la misma pista hasta Serramo y continuaremos por la carretera dirección Baíñas, al llegar al cruce con la AC-441 seguiremos de frente y poco antes de Regoelle una pista de tierra a mano izquierda nos llevará al dolmen después de recorrer un kilómetro. Los cables de alta tensión que pasan por encima del dolmen nos servirán como referencia.

Volvemos a Baíñas, y una vez cogida la carretera AC-441, a los pocos metros de salir del pueblo a mano derecha hay una pista que nos lleva a Rabós, en donde está el Arca de Rabós, algo más pequeña que las anteriores. Después de 7 km. por la AC-441 llegamos a Berdoias, atravesamos la aldea en coche y al final de la misma una pista de tierra nos llevará a la Casota dos Freáns después de 500 metros. Este dolmen data de los años 2500-2000 a.C.

De nuevo en la carretera principal AC-552, pasaremos por la aldea de Vilaseco y giraremos a la izquierda por una pista que nos lleva a la Arquiña de Vilaseco. Está sin excavar y en caso de no tener tiempo podemos desistir de visitarla. Por último, regresamos a Vimianzo pudiendo visitar la mámoa de la Mina de Recesindes, para llegar a ella, saldremos de Vimianzo hacia Camariñas y al llegar al cruce con la AC-433 que nos lleva a Laxe, giraremos a la derecha y tras 300 metros una pista de cemento nos llevará hacia la mámoa.

MAPA:

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